Este soportal olvidado nos recuerda a diferentes comercios que podían existir ahí hace varios años. Con la primera propuesta ilustrativa, mostramos diferentes establecimientos: la farmacia o droguería, la floristería y la tienda de pinturas. Esta ilustración estaría también relacionada con el trabajo del artista, del pintor. Las diferentes acciones refuerzan las diferentes disciplinas, trabajos e intereses que se dan en un pueblo, la floristera, la pintora, la farmaceutica, todos se relacionan entre sí en este mural y también en la comunidad que el pueblo y su gente forma. Esta amalgama de acciones podría resultar embellecedor para esta zona olvidada del barrio, dándole este colorido y esa amabilidad que no tenía una persiana cerrada.
La propuesta alude al sector de la venta de verduras, concretamente de ajos. El diseño figurativo presenta la mezcla de una ristra de ajos con la figura del vendedor o la vendedora. Se hace un homenaje a los posibles vendedores que ocuparon esos soportales y que hoy sus locales permanecen cerrados y casi olvidados por el barrio entero.
